variedades: espacio público, especulación crítica, narración arquitectónica?
Sé que no he escrito en muuucho tiempo, pero eso sucede por falta de organización; aunque no por eso este blog deja de existir, tal vez serán 2 lectores —y seguro uno soy yo— pero creo que en Goole sale más seguido, por las imágenes, alguna que otra tag recurrente, no sé…
variedades: Colonia Roma, conceptualización, conversaciones, TECA
Tiempo ha pasado de que escribí los inicios de la postura teórica, me parece justo comenzar ya con el tema de concepto.
He dudado mucho el cómo comenzar este tema ya que tengo ciertos temores —tal vez infundados— sobre la importancia del concepto arquitectónico; y no me refiero al problema de qué es el concepto arquitectónico en cuanto a su significado, sino a algo más elemental:
cómo darle la importancia justa.
A lo largo de la carrera he escuchado tantas discusiones inútiles sobre lo que es el concepto arquitectónico; comenzando desde qué es un concepto, y luego lo que pasa con un concepto cuando se le pone el adjetivo arquitectónico, o cuál es la forma en que el concepto arquitectónico se debe entender, hay tantas versiones que no dicen lo principal: el concepto arquitectónico es el inicio y fin de todo proceso arquitectónico.
¿cuántas veces no se ha visto que se desarrolla un proyecto a nivel ejecutivo con cientos de planos, siendo que desde un inicio el proyecto no tiene razón de ser? más aún, ¿cuántas veces no se ha visto que al final del proceso se busca una justificación conceptualoide para el proyecto? un parche requerido para justificar la existencia como arquitectura del objeto resultante.
Al final, lo importante es entender el inicio de cualquier proyecto como:
un proceso conceptual que no comprende ningún elemento físico concreto, ninguna materia, ningún material, solamente la necesidad espacial específica del proyecto y entenderla a través de un sistema homólogo o un elemento abstracto que compacte los requerimientos principales.
Esto puede sonar terriblemente incoherente y estoy de acuerdo que lo es en este punto, pero aún falta explicar algo: es una parte del proceso muy sutil y considero bastante efímero su tiempo de vida; el entender el sistema símil es entender el concepto base.
En el momento que el concepto base es asimilado, a partir del requerimiento arquitectónico, se deben entender sus límites y sus alcances; al entender este segundo nivel de abstracción, se obtienen las herramientas indispensables para la argumentación crítica de los demás elementos, como la materia y los materiales.
Cada concepto contiene elementos muy simples; de hecho, el concepto mismo es el elemento mental más simple, pero conlleva ciertas implicaciones que lo vuelven afín con otros conceptos no arquitectónicos, los cuales son los verdaderos elementos configuradores del espacio arquitectónico.
Finalmente —en esta linea de argumentación general— el concepto arquitectónico es un elemento mínimo en el proceso general de la arquitectura que a pesar de su simpleza es el verdadero articulador de un proyecto arquitectónico. Dicho eso con motivo de aclarar los conflictos creo existentes en el desarrollo conceptual de la arquitectura, a saber:
otro problema muy común en la arquitectura es la interpretación errada del concepto como una analogía formal.
Un concepto arquitectónico es una abstracción de la significación espacial de un proyecto, una analogía formal es un resultado visual que nada tiene que ver con un concepto que es el fundamento esencial.
Pensé hablar de tipos de conceptos, mas no estoy seguro aún de un método de clasificación; por ejemplo, no me parece correcto diferenciar los conceptos por su capacidad de extensión, algunos permiten mayor experimentación espacial, otros mayor experimentación material, otros mayor experimentación matérica y es un hecho que eso no los vuelve diferentes en su calidad, modifica su capacidad, pero no es motivo suficiente para separarlos. Eventualmente podría ser útil la división para facilitar su aplicación y economizar el tiempo de especulación conceptual… aún no estoy consciente de la estructura de dicha taxonomía, así que decido dejarlo como tema pendiente ya que no afecta el desarrollo de el tema del concepto en sus generalidades.
Como cierre momentáneo del concepto y pauta de inicio para el siguiente tema —materia— me gustaría hablar de la permanencia del concepto a través del proceso proyectual:
A pesar de que el tema es muy conflictivo, me parece que la gran mayoría de los arquitectos (esperando realmente que fuesen todos) considera el concepto arquitectónico como una constante del proceso que es susceptible de modificaciones superficiales o reconfiguraciones en su estructura inicial; no es el inicio físico del proceso proyectual, tal vez el concepto no es algo consciente durante las primeras etapas, lo cuál tampoco significa que no exista; existe desde el inicio, está durante el proceso e inevitablemente llega un punto en el cual el diseñador descubre cierta constante en el proceso… ¡No es una epifanía! es sólo el devenir del proceso a un plano consciente. En un proceso ideal —tomando como ideal la claridad del proceso e identificación del método y transiciones de etapas, nunca pensando en el proceso real como algo menos efectivo… he dicho que el proceso es personal y la efectividad depende de cada diseñador, nunca del método teórico que, al seguirlo al pie de la letra (golpe fulminante para mi propuesta tal vez) se vuelve un texto lleno de buenas intenciones pero sin ninguna capacidad trascendental— el concepto necesita devenir en cualidades físicas específicas no definidas aún en este punto; las intenciones que expresan el rango de acción del concepto requieren una resonancia material que sólo ciertos elementos son capaces de proporcionar, el encontrar aquellos elementos es la primera parte del proceso donde interviene el plano de la realidad física —asumo la existencia de una realidad ontológica abstracta para fines prácticos en el proceso a pesar de que es un tema justamente discutible, con gran variedad de posturas y sin respuesta clara aún—, realidad que mostrará, aparentemente, de forma clara las primeras intenciones del proyecto.
El siguiente tema es, claramente, la materia; será dividido en dos partes, a saber: abordando la conexión del concepto con la realidad física en una primera etapa (materia), seguida de la explotación de los recursos físicos disponibles para el diseñador (material). Dividido así con el deseo de crear una conexión clara entre la conceptualización pura, la conceptualización dirigida y las posibilidades estructurales reales.
Concepción: Sucede dentro de una corriente anterior, durante su etapa de declive y con la necesidad de creación de una postura adecuada a las necesidades de la sociedad de aquel momento que la postura anterior no es capaz de sustentar ya.Ruptura: Cuando la corriente comienza a tomar fuerza y logra demostrar ante la sociedad expectante que es capaz de sostener sus necesidades mediante los postulados y obras que sustentan su bandera.Apogeo: Es la etapa donde comienza la muerte de la misma postura ya que al no sostener un diálogo con otras propuestas comienza a perder claridad y convertirse en un paradigma, una solución preconcebida que evitará el análisis de la problemática real.Declive: La postura ha caducado y comienzan a nacer nuevas ideas, frescas, con capacidad de sostener lo que ésta postura ya no puede y nace un diálogo entre ambas, es el último momento en que dicha postura será capaz de reconfigurarse y sobrevivir.Revival y abandono: La última fase sucede cuando una postura no logró una reconfiguración y otras propuestas han tomado ya su lugar, llega un momento en el que, después de un primer abandono, algunos retoman sus postulados como nostalgia histórica y al comprobar que realmente no es más que un pastiche histórico terminan por abandonarla y se vuelve caso de estudio teórico sin sustento práctico.
- Un proceso basado en la experiencia estética no visual del usuario.
- Un lugar vivido a través de sus ambientes.
- Un concepto capaz de sustentar un proyecto configurado mediante planteamientos de vida y no de lenguaje.
- Un lenguaje abstracto que no aleje la atención de lo verdaderamente importante del proyecto.
- Una solución primordialmente social y no económica.
- Un diseño integral especulativo, nunca preconcebido.
variedades: conceptualización, tesis teórico arquitectónica
Dormir de 9 AM a 5 PM…
¿Cómo fregados recupero un horario de sueño decente manteniendo las ganas de trabajar que llegan sólo en la noche?
variedades: crisis arquitectónica, narración arquitectónica?
variedades: conceptualización, croquis, en moleskine, especulación crítica, extrapolando
un muro paralelo a otro, en un acceso que crea un quiebre del flujo, intenta representar la angustia por el despliegue de la posmodernidad y la añoranza del pasado emocional de la arquitectura y que, a través de un quiebre, creará un umbral que separará interior y exterior para finalmente enfatizar esa postura de separación del movimiento—finalmente la idea es parte de la misma posmodernidad, pero eso es para otra ocasión… o no—
variedades: análisis crítico, arte, especulación crítica
Sólo una ventana amplia, no hay más. Aquella es la imagen que enmarcará una vista siempre cambiante, diferente cada minuto, cada segundo, una secuencia de elementos que al inicio son incoherentes, atractivos, grandes distracciones por su belleza.
Antes que caigas en cuenta te encuentras mirando la caja tipográfica de un libro que aún emana aquel aroma a tinta que tanto amas, lo abres un poco, metes la nariz y respiras profundamente y en un instante la casa se llena de aquel olor; abres los ojos y sientes que al tocar el interior de las hojas tu dedo se llenará de tinta, así que te limitas a tomarlo de los bordes limpios de la página blanquecina.
Observas el blanco de la hoja y piensas que no debería ser ese el nombre, debería ser alguno más adecuado para aquel color hueso del papel y en un instante recuerdas todos los libros que has leído y piensas en todas las sutiles tonalidades de los papeles, algunos se sienten más grises, otros más rojos, los menos memorables son puramente blancos.
Vuelves a la mancha tipográfica, comienzas a leer y mientras avanzan las lineas escuchas.
Un sonido familiar, una canción que amas, los compases avanzan perfectos con el ritmo de la lectura; por momentos vas de la música a las palabras y viceversa, te adentras en el texto cuando la música pierde intensidad, te introduces en los acordes mientras pasas frases de transición y, también, hay momentos en que ambos descienden y haces una pausa para contemplar las imágenes que se suceden por la ventana. Observas lugares familiares, lugares desconocidos, por momentos prestas atención a la gente y sonríes cuando tu mirada se cruza con la de alguien interesante, aunque nunca lo suficiente como para sacarte de tu casa.
Mientras, te descubres acariciando la textura del papel, del piso, de la ropa… Nunca, ni un sólo momento, la música se ha detenido; toda melodía que has escuchado es agradable, incluso la más corta te trae algún recuerdo.
Continuas las páginas, los capítulos, las canciones, la música, las vistas que arroja aquella ventana, luces, sombras, todo fluye a la par; armónicamente cuando debe y también desentona cuando es necesario, el flujo es en cualquier sentido y mientras todos los elementos avanzan y piensas que te encuentras en algún otro lado te descubres en la misma posición, cada vez que piensas en ello, encuentras la misma respuesta, tú no te has movido.
Llegas a las últimas escenas del libro, avanzas a través de las últimas páginas y cuando has leído la frase final te levantas de tu asiento, detienes la música, abres la puerta que se encuentra detrás de ti y sales de la casa para revivir de alguna forma lo que has leído.
Dentro todo era penumbra y te envolvía la atmósfera del libro y la música, sales y es completamente abierto, iluminado… piensas en la ventana y las imágenes, ¿era una pantalla, una televisión? sabes que no; lo piensas un poco más y te das cuenta que lo único que cambiaba realmente en el paisaje fuera de la ventana era el tiempo. Combinado con las imágenes que se encontraban en el libro el paisaje mismo se transformaba. No cambió el árbol, no cambió la calle, no cambió nada pero todo devino a algo nuevo. Dentro de tu casa lo percibes con fuerza, mas cuando sales de ella dudas de la certeza de tu pensamiento.
variedades: conceptualización, narración arquitectónica?
Un prisma rectangular de tres metros con dos vanos = una cajota con dos hoyos…
variedades: Eufemismos
variedades: conversaciones, extrapolando, luz, TECA